martes, 17 de noviembre de 2015

DIECIOCHO

Holaa! No, bajen ese palo... no me peguen! ahre jajaja. Ya sè que hace rato no vengo subiendo, y algunas en los comentarios me dicen ''Porque desapareciste? Donde te metiste juliett?'' y en los mensajes directos en twitter... hay un motivo por el cual no aparezco casi... CIELO ME LLEVO A EUDAMON! (? bueno basta, sòlo estoy sin inspiracion, y para darles un capitulo de mierda prefiero esperar que vuelva todo eso que hace que mi cabezita piense por minutos en la vida ahre jajaja.
Otra cosa para decirles... TENGO CATORCE! *a quien le importa* el viernes fue mi cumpleaños y agradezco a todas las que me saludaron por Twitter, me hicieron feliz! 
Ahora sì, venga! *lo decia como Soledad Silveyra*

Capitulo Dieciocho

Finalmente, Gimena y Elìas se fueron de la habitaciòn mientras Lali buscaba algo para darse una ducha.
  —Un golpe no es nada, no estoy muerta, y eso es lo bueno —se dijo a sì misma.
Entrò al baño para descambiarse, abriò el grifo de agua caliente y lentamente la bañera se empezaba a llenar, tocò el agua y cerrò el grifo, para abrir el del agua frìa y podes templarla. Se metiò ignorando las heridas que aùn dolìas, y ahora màs gracias al contacto con el agua. Al fin y al cabo, eso la calmaba. 
Tomò su movil ubicado arriba de la ropa limpia y le mandò un mensaje a Eugenia.
«¿Estàs en tu casa ahora?»
La rubia, por su parte, no tardò en responder:
«Sì, estoy con Luz, veni si queres diosa!»
Riò por lo bajo mientras buscaba su toalla.

20 minutos despues...
  —¡Voy!  —gritò Eugenia desde la sala de estar.
Caminò hasta la puerta para abrirla y encontrarse con Lali.
  — ¡Al fin nena!  — dijo— Tengo el chisme del año — musitò.
  —Ah, ¿Sì? ¿Què pasò?
 — Mi hermano, venì, sentate
  — Bueno  — dijo un poco confundida. Luz bajaba del baño— Hola, Luz.
—¿Còmo estàs Laluchis? —sonriò, mientras se acomodaba nuevamente donde estaba antes.
  — Bien  —respondiò— ¿Què tenìas para decirme, Euge?
  — Es sobre mi hermano, tiene otra novia  —Lali arqueò una ceja.
  — Eugenia, me importa poco y nada lo que pasa en la vida de Pet...
 — Esperà —le interrumpiò—, es una nena, ¡Quince años tiene!
Lali la mirò con una inexpresiòn en la cara. —¿Y? —fue lo ùnico que dijo.
—''¿Y?'' ¿Es lo ùnico que decìs? ¡Deberìas estar indignada, esa pendejita està robando tu puesto!
Luz riò.
—¿Te gusta Peter, Lali?
—¡No!, sòlo Eugenia piensa que me gusta, cualquier cosa —sonriò, sin importarle nada— si me disculpan, voy al baño —se levantò ante la mirada de sorpresa en Eugenia. Ella pensaba que iba a tener una reacciòn mala, todo lo contrario.

Lali subiò las escaleras cuando escuchò sonidos y ruidos raros provenientes del cuarto de Peter. Acercò un poco màs su oìdo para escuchar lo que decìas.
 —Te amo —esa era una voz femenina, supuso que era la piba esa de la que le habìa hablado Euge.
—Yo te amo màs —se escuchò, ese sì era Peter. Sintiò una presiòn fea en el pecho, asì que se alejò.
Bajò las escaleras apresuradamente y tomò sus cosas, estaba a punto de llorar, ¿Porquè? No lo sabìa.
—Me tengo que ir —le dijo a Eugenia.
—¿Pasò algo?
—Nada malo —mintiò—, mi mamà me acaba de avisar que llegò una carta para mì.
Saludò a ambas y saliò de la casa Lanzani. Cuando llegò a la esquina, un hombre de traje negro y cara de pocos amigos la llamò, su cuerpo temblaba mientras le tipo se acercaba. Tenìa pinta de ser alguien importante.
  —¿Usted me conoce?  —preguntò una vez que estuvo lo suficientemente cerca de ella. El hombre la mirò confundida.
—No. ¿Te puedo hacer una pregunta? —asintiò— ¿En què casa viven los Lanzani-Suarez?
—Sì —respondiò tontamente—, es por allà.
—Gracias.
Se quedò mirando como el hombre se acercaba a la casa justo cuando salìan Peter y la adolescente. El tipo intercambiò unas palabras con èl mientras la chica gritaba cosas que no lograba escuchar, hasta que el hombre le diò unos inumerables golpes a Peter y luego escapò con la chica, dejàndolo solo y golpeado en la puerta de su casa.

* * *
—¿Quièn serà? —se preguntò Gimena, escuchando los golpes fuertes en la puerta principal.
Abriò y retrocediò unos pasos: Marcos volviò.
Su cara de enojo lo mostraba todo, y temìa que le hiciera algo.
—¿Dònde està la pendeja? —preguntò frìamente.
—No te lo pienso decir —dijo—, no voy a dejar que te acerques despuès de lo que le hiciste hoy, ¡Te odio!
—¡Callate! —gritò, mientras la tomaba por el cuello—, escuchame bien: no voy a parar hasta que esa pendeja de mierda se muera, ¿Bien? Ademàs, es muy fàcil. Mariana es tonta. Y si no la mato, podrìas hacer otras cosas con ella... —sonriò pìcaro—. Y ni se te ocurra denunciarme, porque no sòlo puedo matar a tu amada hija menor, tambien podrìa caer una, dos o un millon de balas en la cabeza de tu hijo, y no creo que te guste. —la soltò, hacièndola caer bruscamente en el suelo. —estàs advertida — dijo, cerrando de un portazo.

¡Que odio le tengo a Marcos! Ojala se muera... y el tipo que golpeò a Peter tambièn. No me peguen, es solo una novela jajaja.
En el pròximo capìtulo van a aparecer los personajes que USTEDES eligieron, por las dudas que lean y su personaje no este, me avisan si? bueno.
¡Espero que les haya gustado y nos vemos pronto!
Juli.

2 comentarios:

  1. Ya comenté en wattpad pero vine para ser el primer comentario allí y aquí jajajajaajajjaja otra vez te digo feliz cumple y con repecto a la nove Carlos es un maldito hdp

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